La crostata de albaricoque, es una tarta típica italiana de masa quebrada rellena de fruta. La preparan con diferentes frutas frescas, como ésta de albaricoque o la de melocotón.
También la hacen de mermelada que es una versión mucho más popular. Mi crostata de albaricoque lleva fruta y mermelada en lugar de azúcar para endulzar.
Ingredientes para una crostata de albaricoque de 26 cm de diámetro.
Masa quebrada
- 250 g de harina
- 15 g de almendra molida
- 1 cucharada de azúcar
- 95 g de mantequilla
- 1 huevo
- 1 vasito de agua fría
- ½ cucharadita de levadura
- 15 g de almendras en bastones

Poner la harina con la levadura, el azúcar y la almendra molida en una ensaladera, añadir la mantequilla en trocitos. Mezclar hasta que parezca serrín, añadir el huevo y el agua en tres veces, formar una bola y dejar tapada en sitio fresco. Dividir en dos partes desiguales, una un poco mayor que la otra. Extender la mayor con un rodillo, repartir las almendras en bastones apretando para que se claven en la masa. Forrar un molde desmontable de 26 cm de diámetro. Pinchar el fondo con un tenedor y conservar en frío mientra se hace el relleno.
Relleno
- 700 g de albaricoques
- 200 g de mermelada de albaricoque
- 3 cucharadas de zumo de limón

Poner la mermelada en un cazo con el zumo y hervir hasta que se licue, colar en caliente una pequeña cantidad y reservar.
Montaje
Lavar y cortar los albaricoques por la mitad, colocar en la base con el corte hacia arriba y repartir la mermelada.
Extender la otra parte de la masa y cortar tiras de 2 cm, hacer un enrejado sobre los albaricoques, sellando los bordes. Decorar con mini galletas de masa.

Cocer en el horno precalentado a 180º con calor sólo por abajo, durante 35 minutos.
Pintar con la mermelada colada y meter de nuevo en el horno con calor arriba y abajo durante 10 minutos más.
Desmoldar la crostata de albaricoque quitando primero el aro del molde, dejar enfriar sobre una rejilla. La base se quitará cuando esté completamente fría para evitar que se rompa.